Hubo un momento que la historia de Javier Mascherano cambió. El volante central es uno de los jugadores que más se identifica con la Selección, pero este Mundial transformó su imagen. De discutido capitán y señalado como ’la cara de la derrota’, a ídolo nacional gracias a la entrega en cada encuentro disputado en Brasil. Su alto rendimiento fue fundamental para que el equipo de Alejandro Sabella arribe a la Final del torneo, a tal punto que varios hinchas reclamaron que él era el auténtico dueño del ’Balón de Oro’, que finalmente se quedó Lionel Messi.


Las promesas de campaña se viralizaron en Twitter y los afiches también. Pero no se quedaron ahí: le encontraron una fiel mascota que tiene el mismo empeño que él para recuperar el balón.
En una puja con un perro, "la tortuga de Mascherano", como la bautizaron, no se deja vencer y lucha por tener la posesión de la pelota. Con una velocidad que asombra, se fastidia porque le roban el esférico y decide tomar una decisión drástica: le ’muerde los talones’, literalmente, igual que su flamante ’dueño’ a los rivales.