Integrantes de una ONG de Rosario iniciaron esta novedosa propuesta, que consiste en la instalación de una pequeña casilla en la que los lectores circunstanciales pueden retirar ejemplares y llevarlos a sus casas, con el compromiso de devolverlos.
“Esto ya se hace en diferentes países, pero es la primera vez que se implementa en Argentina”, señaló
una de las integrantes de la organización, y añadió que “la idea de las minibibliotecas públicas es fomentar la participación ciudadana”.
Otra de las chicas de “El desafío” indicó que “los libros tienen un código de internet en la primera hoja y la idea es que dejen un comentario a propósito de esta iniciativa”.
“Ahora estamos en una campaña que se llama «ix2», que apunta a duplicar nuestra base de inversores sociales, que son las personas que nos apoyan con lo que puedan todos los meses con sus tarjetas de crédito”, amplió.
El aporte se puede realizar entrando a la página web de la organización, que es www.eldesafio.org.ar.