
Hasta el bar de la villa fue vendido, además de una gran cantidad de construcciones que tienen un estilo muy del siglo XVII. Las 205 hectáreas que anteriormente pertenecían a la Universidad de Lincoln College hoy pasaron a nuevo dueño.
Uno de los más importantes edificios que tiene el lugar posee una construcción de piedra, diez habitaciones, un cine, salón de juegos, estudio y más.
Lo único que quedó fuera del acuerdo fue la iglesia, según informa Daily Mail, que todavía continúa siendo parte de la Iglesia de Inglaterra.