Un extraño gato de color verde esmeralda ha aparecido en las calles de la costera ciudad búlgara de Varna. En un principio, los residentes pensaron que el hallazgo era resultado de la acción de unos vándalos que habrían pintado al gato. No obstante, se ha descubierto que la explicación verdadera del color inusual del animal es que estuvo durmiendo en un garaje donde se guardaba pintura verde sintética.
Desde la cuenta de Twitter del diario "The Telegraph", informan la resolución del misterio.