Según consta en la denuncia presentada por la mujer, en el transcurso del diálogo su marido le dio la espalda y lanzó una ventosidad que interpretó iba dirigida a ella. La demanda fue admitida y dio lugar a un juicio contra el marido por una supuesta falta de injurias.
En su resolución, el titular del juzgado consideró que los hechos enjuiciados constituyen una actitud de menosprecio que lesionó la dignidad de la denunciante, además de menoscabar su autoestima y honor. El autor de la flatulencia fue condenado a un mes de multa.