Una mujer decidió separarse definitivamente de su pareja y festejó con una sesión de fotos muy graciosa y con mucho rencor: hizo añicos todas las pertenencias de su ex y rompió la ropa con la que se casó.
Catherine Marie Haberkorn quiso celebrar su divorcio de la manera más insólita: destrozando todo y capturándolo con una cámara.
Rompió miles de fotos de su ex marido, las prendió fuego, posó con su vestido de novia y lo destrozó con un cuchillo. También quiso destruir una torta de casamiento con un bate de béisbol.
Al parecer, no todos terminan con el “felices por siempre” y ella se lo tomó de la peor manera.
“Recomiendo fervientemente que todos los que se divorcien, hagan una sesión de fotos de este estilo para descargarse de todos sus sentimientos”, explicó Catherine.