
En Capital Federal, Gran Buenos Aires y otras ciudades, la atención al público en bancos públicos y privados será reducida y cerrarán sus puertas más temprano, desde las 12 hasta las 15. En otras provincias, donde el servicio al cliente está partido en dos turnos, el paro se pondrá en marcha entre las 10 y las 13 horas, dependiendo de la realidad del distrito.
Con esta medida de fuerza, la Asociación Bancaria profundiza su perfil confrontativo en medio de los pedidos de su secretario general, Sergio Palazzo, a que la CGT convoque a un paro nacional y a un "plan de lucha" para que el gobierno de Mauricio Macri implemente medidas que recuperen el poder adquisitivo del salario. "El Gobierno corrige cuando se ve presionado por los sectores afectados", afirmó el dirigente bancario.