
La iniciativa oficial propone eliminar los feriados creados solamente con fines turísticos (los dos por año que permite el artículo 3ro del decreto que hoy rige) y traslada todos los feriados nacionales "movibles" (cuyas fechas coincidan con los días martes y miércoles) al lunes anterior.
El antiguo régimen estaba concebido con la finalidad de aumentar la actividad turística y agregó dos feriados con fines turísticos por año; en 2016, fueron el 8 de julio y el 9 de diciembre, generando 4 días no laborables consecutivos.
Para el actual Poder Ejecutivo, no se observa que el régimen vigente haya cumplido con las expectativas esperadas en términos de incrementar el turismo interno, y en cambio ha generado a pequeños y medianos productores y comerciantes perdidas económicas significativas. Esto sumado al compromiso con la educación pública y el cumplimiento de los 180 días de clases.
El proyecto también detalla los días no laborables para la comunidad judía y musulmana. Y establece que los trabajadores que no presten servicios en las festividades religiosas mencionadas, tendrán la remuneración y los mismos derechos que si hubieran prestado.