16/12/16

Mucho más que una Casa…por Lis Solé.

Es cotidiano quejarse, y más de un pueblo… Pero es natural quererlo. Su entrada, sus casas, sus calles, su plaza, sus lugares forman parte de uno mismo.
Todos los días, paso enfrente de la Casa. Es una Caserón grande en la esquina de San Martín y Wallace. Muy antiguo, se mantiene firme y hasta casi soberbio, como sin edad… Y las cosas sin edad, tienen mucha historia, historias que trascienden lo familiar y pertenecen a la comunidad. Tiene cuatro ventanas grandes con rejas sobre la calle San Martín y dos puertas zaguán. Bellísimo… Las veredas de lajas grises le dan más aire señorial...

No hay fecha precisa de construcción y el primer propietario conocido fue don Pedro Orella, vasco, nacido en 1860. Don Pedro, un hombrón de pelo colorado y ojos claros, llega a Alvear como comerciante y con una posición sólida, compra campos a don Roque Robles, uno de los primeros pobladores de Alvear, Juez de Paz entre muchas otras cosas. Don Pedro Orella es Presidente de la Sociedad Española y del Concejo Escolar durante muchos años. En el campo, compra “San Urbano” de Robles y en homenaje a su mujer, doña Salomé Villaverde, hermana del diputado José Villaverde, lo llama “La Salomé”.
En “La Salomé” se dedica a la cría del ganado. Tiene muchos caballos que trae a la quinta que posee en el pueblo. La quinta, es La CASA de San Martín y Wallace. Toda esa cuadra donde ahora es Club Deportivo y el Correo, pertenecía a Pedro Orella: había galpones y caballerizas donde se guardaban los animales que pastaban en La Espadaña, galpones con un primer piso para el cereal, huertos y quintas. La casa es grande con muchas habitaciones, un patio interior precioso con galerías… Una cocina, comedor y sala de estar para sus nueve hijos: José Benito (diputado provincial), Oscar, Paulino, Osvaldo, Catalina (nacida en la casa en 1889 igual que sus hermanos y casada con Molinari), María Magdalena (de Perdriel), Modesta, Felisa (casada con Lescano) y Araceli (casada con Campón).
Casimira Modesta Orella, en 1908, se enamora de un médico recién recibido que llega al pueblo: el Dr. Bernardino Althabe (1878-1958) y juntos se mudan a la Casa donde atiende a sus pacientes en un enorme consultorio con escritorio, dos camillas, un gran cuadro que muchos recuerdan de una escena hospitalaria y que aún engalana la sala. A ella se accedía por una sala de espera donde siempre estaba la secretaria doña Segunda Riglos. Los más apurados con recetas o amigos, entraban por la puerta principal que también comunicaba con el consultorio.
El Dr. Althabe ejerció la medicina en forma ininterrumpida durante 33 años, hasta 1941 en que, por razones de salud, comenzó a pasar lo meses fríos en Buenos Aires en un piso de la avenida Santa Fé. Modesta se instalaba de diciembre a mayo en la casa con sus cinco hijos: María Salomé (la Rubia), Juan Carlos, José Luis (morocho y de buena estampa como el padre), Bernardino Modesto, y Luis María. Estos dos últimos, médicos también.
La vida en la casa transcurrió entre muchos chicos, pacientes y políticos. El Dr. Bernardino Althabe en los comicios del 30 de marzo de 1930, es elegido Senador por la Unión Cívica Radical en la 5ta Sección Electoral, el diputado electo en esa oportunidad fue Alejandro Armendáriz. Las asambleas partidarias del radicalismo fueron realizadas el domingo anterior en “Los Cuatro Caminos”, “El Chumbiau” y “Santa Isabel” fueron sumamente concurridas por el vecindario de esos lugares. Hay unas fotos donde se observan los camioncitos “International” yendo por el campo con banderas y fervor partidario.
Mientras, su carrera médica no paraba: fue Director del Hospital “Bernardino Rivadavia” durante 25 años, siendo su primer Director en 1920. Dos de sus hijos se reciben de médicos: Luis María y Bernardino Modesto, el “Pollo”, que continúa con la intensa actividad de su padre siendo electo también Diputado Provincial.
Si sabrá de historias esta casa… Durante 70 años, constantemente sus paredes escuchan autoridades políticas a nivel provincial y nacional. Es visitada por Ricardo Balbín en muchas ocasiones… “Nenucha” Silvestre, esposa del “Poyo” Althabe contaba que lavaba lechuga en la cocina junto a Arturo Illia, Presidente Constitucional argentino… El Gobernador de la Provincia, Anselmo Marini estuvo el 20 de Julio de 1964, para el 95 aniversario del Pueblo, juntos ahí con el “Poyo”. ¡Cuántas veces Juan José López Aguirre, Jefe de Policía de la Provincia descansó en sus corredores junto a su hijo, Ricardo López Murphy, Ministro de Defensa, de Economía y de Infraestructura y Vivienda durante la presidencia de Fernando de la Rúa.
Si sabrá de historias esta Casa… Sus paredes y los alvearenses memoriosos seguirán contándonos sobre ella. Casa Museo en sí misma resguarda muebles, objetos, diplomas y reconocimientos a generaciones de médicos y políticos que caminaron sus patios generando proyectos de patria grande. Un deber y compromiso del pueblo y las Autoridades de General Alvear para su Guarda, Cuidado y Puesta en Valor porque… ¡Vaya si sabrá de Historias esa Casa!