26/9/19

Qué es el Síndrome de Asperger

El encendido discurso de Greta Thunberg en la cumbre sobre el clima en la ONU cautivó al mundo. La joven de 16 años reclamó a los líderes políticas reales para limitar el calentamiento del planeta.
Pero no sólo sus palabras fueron protagonistas. El lado B de la masificación del discurso se dio en las redes sociales, donde a la adolescente le llovieron los más crueles cuestionamientos. Su gesticulación, su actitud, sus lágrimas y demás fueron blanco de críticas. Todo esto, sin tener en cuenta las características particulares de la fundadora de Fridays for Future.

Greta tiene síndrome de Asperger, un trastorno calificado como el más leve del espectro autista. Según especialistas del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO), “esta condición del neurodesarrollo impacta específicamente en el funcionamiento social y el espectro de actividades e intereses de aquellos individuos que lo presentan e influye de manera directa en la forma en que procesan la información, dan sentido al mundo en el que viven y se relacionan con los otros”.
Greta Thunberg en las Naciones Unidas.
Greta Thunberg en las Naciones Unidas.
Según la doctora Andrea Abadi, psiquiatra y directora del Departamento Infanto Juvenil de INECO, entre las características principales de quienes viven con este síndrome figuran las dificultades para empatizar con los otros; el comportamiento emocional y socialmente inapropiado; la existencia de un interés “obsesivo” en un solo objeto o tema, con exclusión de cualquier otro (generalmente atípicos o poco comunes para las personas de su edad); la presencia de movimientos motores torpes y descoordinados; el alto nivel de vocabulario y patrones de discurso formales; la escasa comprensión de chistes o dobles sentidos; el pensamiento rígido y un nivel de inteligencia normal o superior.
La especialista aclaró que “si bien es necesario destacar que el Síndrome de Asperger se manifiesta de manera diferente en cada individuo, podemos reconocer que hay en todos ellos un rasgo común: las significativas dificultades para la interacción social, especialmente con aquellas personas de su misma edad”.
En ese sentido, la médica aseguró que “nada impide que una persona que presente Síndrome de Asperger pueda desarrollarse plenamente”. Para ello, destacó, es fundamental la detección temprana y un abordaje interdisciplinario que incluya a la psicología cognitiva conductal, el lenguaje, la neuropsicología o la psicopedagogía, la terapia ocupacional con integración sensorial, el floortime (terapia de suelo), la terapia recreacional, la musicoterapia y la psiquiatría infantil.