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Dormir con una almohada entre las piernas es un hábito común por comodidad, pero también ofrece beneficios para la salud. Expertos indican que la postura al dormir afecta la pelvis, cadera y columna vertebral. Para quienes duermen de lado, esta técnica alivia la presión entre las piernas.
Generalmente, se coloca entre rodillas o muslos; para dormir boca arriba, en la parte baja de las piernas para soporte. Esto impacta en la alineación corporal y mejora la calidad del sueño.
La fisioterapeuta Ana Rodríguez, especialista en sueño y postura de la Universidad Nacional, explica que mejora la posición pélvica y ayuda con dolores en extremidades inferiores. “La almohada entre las piernas mantiene la pelvis neutral y evita el desplazamiento de la pierna superior, previniendo torsión lumbar”, afirma.
Además, reduce presión en articulaciones sacroilíacas y nervio ciático al impedir la caída de la pierna superior. Un estudio de 2021 en Sleep Medicine Research, titulado “Efectos del uso de la almohada corporal en la postura al dormir y la arquitectura del sueño en adultos jóvenes sanos”, halló que reduce presión en hombros, caderas y cuerpo entero. Aumentó el tiempo en posición fetal sin cambios, disminuyendo la fragmentación del sueño y prolongando el descanso en quienes usan cojín de lado.
Esta posición alivia dolores y favorece un mejor descanso. Expertos recomiendan almohada firme o de grosor moderado entre rodillas. Para boca arriba, bajo las extremidades para sostener la curva lumbar natural. Si surgen nuevos dolores en espalda o rodillas, ajustar el grosor para evitar separación excesiva de piernas.
